Será líder del Cannondale. Cambió la idea de ganar clásicas por buscar el ‘top’ 10 en Francia.
Al principio de este año, el mánager general del equipo Cannondale, Jonathan Vaughters, le dijo a EL TIEMPO que en esta temporada el objetivo del colombiano Rigoberto Urán era buscar victorias en las pruebas de un día y que al Tour de Francia iría a buscar triunfos de etapas, pero luego de terminar el primer semestre de la temporada, los planes para el ciclista nacional de 30 años han cambiado.
Urán llegará al Tour como jefe de filas de su escuadra y la idea con él es pelear la clasificación general desde mañana, cuando se baje la bandera. Este cambio de planes con él se debe a que cuando estaba listo para disputar las clásicas se enfermó y no pudo responder a las expectativas. Rigoberto Urán fue 64 en la Strade Bianche, tercero en el GP Industria & Artigianato, 23 en la Flecha Valona y 21 en la Lieja Bastonia Lieja, resultados en las competencias de un día.
“Teníamos un primer objetivo en este 2017 para él que eran las clásicas, lo ha hecho bien, pero luego acabó País Vasco enfermo y replanteamos el objetivo de las carreras de un solo día. Le faltó un plus en la de Lieja, debido a la enfermedad, y era el poco tiempo para recuperar su salud en las demás competencias, pero en el equipo analizamos la situación y estamos satisfechos con lo que ha hecho”, le dijo a EL TIEMPO el español Juan Manuel Gárate, el técnico del Cannondale. A Urán, en las pruebas de una semana, no le ha ido mal este año, pues entre sus figuraciones más importantes están el octavo puesto en la Vuelta a Andalucía, el mismo que ocupó en la Tirreno Adriático que ganó su compatriota Nairo Quintana y acabó de 21 en la general de la Vuelta a Romandía. En la Ruta del Sur, última prueba antes del Giro, terminó de octavo y se mostró en las jornadas de montaña.
Rigoberto Urán ya tiene experiencia, en su hoja de vida figuran tres participaciones en el Tour, seis en el Giro de Italia y cuatro en la Vuelta a España. “Urán llega bien al Tour. Está con muchas ganas de correrlo, muy motivado, incluso más que el año pasado. Cuando se prepara de la mejor manera, Urán es un corredor competitivo, y con miras al Tour llega bien. Tiene la esperanza de hacerlo bien”, declaró Gárate. El técnico habla de que en el País Vasco Urán falló en la contrarreloj, algo que ha sido característico de él en los últimos dos años, desde que llegó al Cannondale. El colombiano venía de una buena forma en esos esfuerzos del Quick-Step, incluso ganó la etapa en el Giro de Italia del 2014 en Barolo, sobre 42 kilómetros, y se puso de líder, pero en el último tiempo ha fallado.
“No salen las cosas bien en las contrarrelojes. Quizás tenemos pequeños problemas técnicos que debemos superar internamente. Nos centramos en carreras en las que no haya muchas etapas de esta índole. Este Tour es ideal porque tiene menos kilómetros en contrarrelojes y eso nos ayudará”, agregó Gárate. Urán sabe que tiene una buena oportunidad de sacarse un clavo en el Tour. Su estreno, en el 2009, fue muy bueno, pues terminó de noveno. En el 2011 acabó en el puesto 23 y en el 2015 terminó de 43. Para él, este Tour es más abierto, explosivo.
“Solo esperamos que todo nos salga. Urán ha hecho un buen trabajo, tras su recuperación, y con el recorrido que hay, pues tiene gran chance para estar adelante”, aseguró el técnico. En la semana, Charly Wegelius, director deportivo del Cannondale, dijo: “Es hora de que vuelva al Tour. Se ha centrado en el Giro durante muchos años. De todos los Tours que he visto, este es uno que se adapta a él bastante bien”. Urán volverá a vestir el uniforme de color verde del Cannondale en el Tour, el primero que hará con esta escuadra, y aspira a regresar en esta competencia a los primeros puestos, porque entiende que después del Giro del 2014, en el que terminó de segundo, sus resultados no han sido los que él deseaba.
Fuente: E l tiempo.com